Qué hacer cuando una plaga arrasa con tu cultivo y no tienes químicos

Cuando los bichos llegan primero y el dinero no alcanza para pesticidas

Uno cuida su milpa, prepara el terreno, siembra con fe… y de pronto, un gusano, una mosca o un hongo empieza a comerse todo. Las hojas se secan, las matas se doblan y el corazón se encoge. Y para colmo, no hay dinero para comprar químicos. Pero no todo está perdido. A veces, con lo que hay en casa o el rancho, se pueden frenar plagas sin gastar mucho. Aquí te explicamos cómo reaccionar a tiempo, qué hacer con lo que tienes y cómo prevenir la próxima vez.

Primero lo primero: observar y actuar rápido

El peor error es esperar a que “se quite solo”. Si ves hojas mordidas, manchas, telarañas, gusanos o animales raros en las plantas, actúa. Mientras más pronto, más posibilidad de salvar algo. Una plaga puede expandirse en dos o tres días y acabar con todo.

Identifica lo que tienes enfrente

No hace falta ser agrónomo, pero sí hay que observar bien. ¿Es un gusano? ¿Mosca? ¿Hongos? ¿Chinche? Cada uno se combate distinto.

• Gusanos: Hacen hoyos en hojas o tallos, se esconden en la base.
• Mosca blanca o trips: Hojas pálidas, puntos blancos, plantas débiles.
• Hongos: Manchas cafés o blancas, humedad en hojas, mal olor.
• Pulgones: Insectos pequeños, verdes o negros, que se amontonan en brotes tiernos.

Soluciones caseras que sí funcionan

1. Agua con jabón

Una mezcla de agua con jabón neutro (como jabón de barra rallado o lavatrastes sin perfume) puede matar pulgones, mosca blanca y trips. Mezcla 1 cucharada por litro de agua y rocía por la tarde, cuando ya no da el sol directo.

2. Ajo y chile en infusión

Licúa 3 dientes de ajo, 3 chiles secos o frescos, y un litro de agua. Cuela y aplica en hojas. Sirve contra plagas masticadoras y repele nuevos ataques. Hazlo cada 3 días por dos semanas.

3. Ceniza y cal

Espolvorear ceniza de leña con un poco de cal agrícola al pie de las plantas ayuda a secar el terreno y alejar gusanos y hongos. No lo pongas sobre las hojas, solo en el suelo.

4. Alcohol con tabaco

Remoja 5 colillas de cigarro en medio litro de alcohol por 24 horas. Cuela y diluye con otro litro de agua. Rocia en las partes afectadas. Es fuerte, no usar seguido.

5. Cebolla fermentada

Parte 3 cebollas en pedazos, colócalas en un recipiente con agua y déjalas fermentar al sol por dos días. Rocía esa agua sobre las plantas. Repele y debilita pulgones.

¿Y si ya se perdió una parte del cultivo?

No te detengas. Arranca las plantas dañadas para que no contagien a las demás. No las dejes en la tierra. Si puedes, entiérralas lejos o quémalas. Sigue cuidando lo que queda: a veces lo que se salva puede ser suficiente para resembrar o al menos tener semilla para el próximo ciclo.

Errores que debes evitar

• Usar agua con cloro directo: mata la planta y no elimina plagas.
• Rociar a mediodía: el sol quema las hojas mojadas con solución casera.
• Mezclar muchas recetas al mismo tiempo: puedes intoxicar la planta.
• No hacer seguimiento: una sola aplicación no basta, hay que insistir.

Cómo prevenir futuras plagas

✔ Rotación de cultivos

No siembres lo mismo en el mismo terreno cada año. Cambiar ayuda a cortar el ciclo de las plagas.

✔ Siembra escalonada

Divide la siembra en dos fechas. Así, si una parte se afecta, la otra aún tiene tiempo de crecer.

✔ Asociar cultivos

Planta maíz con calabaza o frijol. Algunas plantas repelen plagas de otras y se protegen entre sí.

✔ Limpieza constante

No dejes maleza ni residuos húmedos cerca de la milpa. Ahí se esconden las plagas.

No todo depende del químico

Los agroquímicos pueden funcionar, pero también cuestan, contaminan y a veces fallan. En cambio, observar la planta, usar lo que hay en el rancho y actuar a tiempo puede salvarte una temporada. No se trata de inventar fórmulas mágicas, sino de volver a lo que ya sabían los antiguos: el campo habla, y si se le escucha bien, también se defiende sin tanto gasto.